este soy yo:
Llegué a la docencia en 2003 después de varias experiencias profesionales que podían haber llegado a llenar mi cartera pero nunca fueron aspirantes a llenar mi alma. Desde entonces aprendo cada día de mis compañeros y, sobre todo, de mis estudiantes. Me considero un privilegiado por poderlos acompañar durante cuatro años de sus vidas.
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Estoy interesado en eso que se viene haciendo llamar innovación educativa siempre que focalice su objetivo en situar al alumno en el centro del proceso de enseñanza-aprendizaje. Solo empoderando al alumno, dándole las riendas de su formación, conseguiremos la implicación emocional necesaria para generar un aprendizaje verdadero y perdurable.
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Mi evolución como docente me ha llevado a experimentar con la gamificación, la clase invertida y el uso pedagógico de las nuevas tecnologías en el aula. Sigo en ello.
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No solo profe.
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Químico de formación, aunque enseñe tecnología e informática, lector semicompulsivo de todo tipo de literatura, desde novela negra hasta innovación pedagógica, actor aficionado en moratoria desde el nacimiento de mi segundo hijo y corredor (me resisto aún a ser runner) de los que llegan con el grueso del pelotón y disfrutan de la liberación que supone saber que no vas a ganar.
